POR: LUNA BLOGS
- Capítulo 4 (Final):
Luna y Sombra se giraron repentinamente, para ver que Celestia los observaba con las pupilas como dos puntitos y con la boca abierta. Pegó un salto y se colocó delante de su hermana menor:
- ¡¡¡NI SE TE OCURRA ACERCARTE A ELLA!!! - le amenazó con su magia mientras intentaba apartar a Luna.
- ¡No! ¡Celestia, yo lo amo!
- ¡CALLA, HERMANA! ¡TE HA HECHIZADO PARA HIPNOTIZARTE Y CONTROLARTE!
- ¡Celestia, no la he hechizado! ¡Yo también la amo! ¡No quiero hacerle daño! - interpuso Sombra.- ¡CALLA, ASQUEROSO MONSTRUO! ¡TRATABAS DE CONVENCER A MI HERMANA DE DERROCARNOS Y TENERNOS A NOSOTRAS Y A NUESTRO REINO DE ESCLAVOS, ¿NO?
- ¡NO, CELESTIA, YO NO ESTOY HECHIZADA! ¡YO LE QUIERO, Y MÁS QUE A TI! - Luna se interpuso entre ambos para evitar que le hiciera daño.
Celestia apartó de un empujón a Luna, hacíendola caer al suelo, e intentó herir a Sombra con su cuerno, pero éste fue más rápido y se esfumó, dejando a las dos hermanas solas.
- ¡HERMANA, NO ESTOY HIPNOTIZADA POR SOMBRA! ¡NOS AMAMOS!
- ¡CÁLLATE! ¡ÉL TE HA HECHIZADO, Y YO ENCONTRARÉ LA MANERA DE QUE VUELVAS A SER NORMAL! ¡VAMOS A PALACIO AHORA MISMO!
- ¡No! ¡No iré más contigo a ninguna parte! - intentó salir volando, pero algo estruendoso y potente la derribó, haciéndola caer al suelo desmayada, viendo a lo lejos una figura blanca acercarse.
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La joven yegua se despertó tiempo después en un lugar frío y extraño. Notó que estaba encadenada de las cuatro patas, y que sólo había dos pequeñas antorchas iluminando el lugar. Luego recordó. ¡Eran los calabozos de palacio! ¿Cómo había llegado allí? Lo único que recordaba era estar en el bosque Everfree con Sombra, y de repente...
Notó un tintineo de llaves y la puerta de la celda abrirse... Entró su hermana Celestia acompañada de un par de guardias reales:
- Hola hermana. ¿Estás bien?- ¿Qué ha pasado? ¿Qué me habéis hecho?
- Lo siento hermana, pero el hechizo que Sombra te lanzó es muy poderoso. Tuve que detenerte antes de que te escaparas. Como supuse que al despertar opondrías resistencia, te he tenido que encadenar aquí, pero no te preocupes, Star Swirl está en camino.
- ¿Star Swirl el Barbudo? ¿Ese viejo mago? ¿Por qué?
- Él sabrá cómo hacer que vuelvas a la normalidad.
- ¡Pero yo no estoy hechizada! ¡Yo en verdad amo a Sombra!
- Ya estás otra vez, él no te quiere, sólo te ha hechizado para hacerse con el control de nuestro imperio. Pero tranquila, él llegará pronto.
- ¡No, hermana! ¡Lo amo! ¡Por favor no le hagas daño! - intentó caminar hacia Celestia, pero las cadenas se lo impidieron cuando iba a tocar a su hermana.
- Shhhh... Ya, Luna, ya no recordarás más ésto y podremos vencer a Sombra juntas... - le puso un casco en la cabeza y le acaricio la crin. - Oh, mira, parece que ha llegado. Ahora volvemos.
Se marcharon y cerraron la puerta, dejándola sola. Luna ya no sabía qué hacer. Sabía que ésto era el fin, que acabarían con su amor sí o sí.
Un rato después se abrió la puerta, y pasaron Celestia, sus dos guardias y el mago Star Swirl el Barbudo. Llevaba su típico sombrero y su túnica, y se impresionó cuando vio a la yegua de la Luna encadenada así:
- Aquí está, Star Swirl. El Rey Sombra le ha echado un conjuro o algún hechizo para que se enamore de él, para así convencerla de derrocarme y hacerse con el imperio. Por suerte la atrapé y te escribí para ver si podías arreglarlo.- ¡No! ¡Star Swirl, no la crea! ¡Yo estoy enamorada de él, pero no por un hechizo!
- Éso se tendrá que ver, Princesa... - respondió el barbudo mago.
Los cuatro entraron, cerrando la puerta a su paso.
- Mmmm... la magia del Rey Sombra es muy poderosa, por lo que para contrarrestar su hechizo tenemos que hacer otro que la devuelva a la normalidad.
- ¿Usted puede hacer eso? - preguntó Celestia.
- Sí, pero necesito que usted me ayude. - contestó.- Un hechizo de reasignación mental será la solución. Es un hechizo para manipular la mente y quitar algún comportamiento que no queramos. Es muy complicado, pero entre los dos podemos.
- De acuerdo, cuando usted diga.
- ¡No por favor! ¡Os lo suplico! - ella comenzó a llorar con desesperación.
- Por precaución, será mejor que los guardias se retiren y sólo estemos los tres.
Los guardias obedecieron y se fueron, cerrando la puerta tras ellos.
- ¿Preparada?
- ¡NOOO! ¡NO LO HAGÁIS!
- (...) Preparada.
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Era una noche muy fría allí en el Imperio de Cristal. Sombra no había dormido desde aquella madrugada en el bosque, y no paraba de planear cómo recuperar a su amada. Hacían 3 días de éso y ella no había vuelto, por lo que tendría que atacar para recuperarla. De repente, escuchó una explosión cerca de allí, parándole el corazón del susto. Se asomó al balcón y vio a Celestia atacando su castillo con su magia. Él salió corriendo y la encaró:
- ¡CELESTIA!
Ella se fijó en él e intentó atacarlo, pero Sombra lo esquivó:
- ¡NO TE TENGO MIEDO, CELESTIA! ¡¿QUÉ LE HAS HECHO A MI LUNA?!
La yegua entonces apareció detrás de su hermana. Lo miraba con odio y desprecio, con unos ojos a los que él nunca miró, e intentó atacarlo, consiguiendo herirlo en una pata:- ¡NOO! ¡LUNAA!
- Ha llegado tu hora, Sombra...
Las dos hermanas se juntaron, y con sus cuernos provocaron un gran destello que lo cegó. Un rayo de luz lo sumergió casi al instante en un limbo frío y oscuro del que nunca más podría salir...
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FIN
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- COMENTARIO: Espero que os haya gustado este FanFic, las ilustraciones pertenecen a sus respectivos creadores. ¡Hasta la próxima! :D
Me gusto mucho.
ResponderEliminarMe fascino este fanfic pero al final me dio algo de triztesa por ese amor prohibido que nunca pudo florecer
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